Crea un vínculo con niños y niñas y construye un mundo más justo e igualitario.
Tu apoyo se multiplica y se extiende a otros niños y niñas y sus comunidades. Garantizas una educación de calidad para miles de niños y niñas. Mejoras el bienestar y la seguridad de la infancia que más lo necesita.
Cuando apadrinas un niño o una niña, no solo mejoras su vida, sino también la de su comunidad
Cuánto dura
Dependiendo del país, el apadrinamiento dura mientras el niño o la niña esté en etapa escolar básica, en educación primaria o entre los 5 y 14 años.
Qué recibe
Nos aseguraremos de que el niño o la niña reciba una educación de calidad, equitativa y segura, y de que crezca en entornos libres de violencia.
Qué recibes tú
Para que veas cómo está creciendo, una vez al año recibirás una foto del niño o la niña y una de sus manualidades.
“La recogida de dibujos, cartas y la toma de fotografías de los niños y las niñas apadrinados es uno de los trabajos más agradecidos que llevamos a cabo”
Equipo apadrinamiento
Apadrina a un niño o a una niña y en tu próxima declaración de la renta podrás deducir hasta un 80% de la cantidad aportada.
Quiero colaborarPor cada 10 euros que donas
8 euros
se destinan a la protección y la educación de la infancia.
1 euro
se destina a gastos de administración de Educo.
1 euro
se invierte para seguir creciendo y conseguir más donantes como tú.
El apadrinamiento permite cooperar en la mejora de las condiciones de vida de un niño o una niña de una población vulnerable, las de su familia y su entorno mediante proyectos de desarrollo que benefician a toda una comunidad. Una vez garantizado todo esto, una parte de tu aportación se destinará a la puesta en marcha de programas de desarrollo en otras zonas, especialmente de educación y protección, permitiendo que otras personas, en otros países vean también mejorada su calidad de vida.
El apadrinamiento dura mientras el niño está en la etapa escolar básica (primaria), aproximadamente de los 5 a los 14 años dependiendo del país. Otras veces el apadrinamiento termina porque el niño emigra junto con su familia a una zona en la que Educo no trabaja. Cuando finaliza el apadrinamiento por alguna de estas razones, Educo lo comunica al padrino y se le ofrece la posibilidad de apadrinar a otro niño.
Es prácticamente imposible, ya que muchas veces las familias emigran y no dicen dónde se dirigen, por lo que perdemos el contacto con el niño. Si el niño ha pasado a secundaria también es difícil ya que es en las escuelas de primaria adonde los niños reciben el material escolar y las cartas de los padrinos.
Una vez hayas apadrinado recibirás la fotografía del niño o la niña con sus datos personales y dos veces al año te enviaremos un testimonio o trabajo escolar suyo. También recibirás información sobre su país y, más concretamente, sobre la zona en la que vive y los proyectos que se llevan a cabo allí. Además, también te enviaremos, de forma periódica, nuestra revista y, una vez al año, nuestra memoria anual.
Siempre que lo desees y tantas veces como quieras. Deberás enviar las cartas al apartado postal que corresponda con el nombre de la delegación del país al que pertenezca el niño o la niña. A continuación, te los facilitamos:
Una vez la correspondencia haya llegado a las centrales, nuestros compañeros se la entregarán al niño apadrinado. Pedimos que se escriba directamente a las oficinas centrales porque así tenemos mayores garantías y mayor seguridad de que la correspondencia llegue a su destino.
El niño sabe que Educo colabora en las escuelas, conoce que la ayuda viene de colaboradores españoles, pero en ningún caso se quiere personalizar, ya que no todos los niños están apadrinados.
Algunas veces lo hacen, aunque no suele ser habitual ya que los niños apadrinados están en la escuela primaria y muchos aún no han alcanzado un buen nivel de lectura y escritura. Además, Educo realiza los proyectos en comunidades muy pobres donde los niños dedican mucho tiempo en desplazarse a la escuela y, a veces, al regresar a casa tienen que ayudar con las tareas domésticas o cuidando a hermanos más pequeños. Por supuesto, si el niño desea escribir a su padrino puede hacerlo a través de educo. Nuestros compañeros recogen las cartas de los niños que hayan querido escribir y, cuando hay algún envío a la sede de Barcelona, aprovechan y nos las remiten para enviarlas a los padrinos.
En Educo trabajamos en proyectos de desarrollo a largo plazo para conseguir, de manera sostenible, que las poblaciones más vulnerables de América Latina, África y Asia puedan mejorar sus condiciones de vida.
Recibirás en tu casa información de forma periódica sobre nuestras actividades a través de la revista Educo. También te enviaremos nuestra Memoria de actividades cada año para informarte de manera detallada de todo lo que hemos llevado a cabo. Además, encontrarás más información a través de nuestra página web.
Los equipos que trabajan en los proyectos suelen ser personas del propio país especializados en unos campos concretos. De esta manera conseguimos una mayor implicación entre las comunidades con las que trabajamos y nuestros técnicos. Puedes ponerte en contacto con nuestro departamento de voluntariado en la siguiente dirección: voluntariado@educo.org
Puedes viajar y conocer personalmente a los niños y las niñas, visitar el pueblo donde viven y ver las actividades que llevamos a cabo. Para que este momento sea inolvidable te pedimos que nos avises con, al menos, un mes de antelación. Así podremos organizar tu visita, adecuarla al programa de trabajo de nuestro equipo y asegurarnos de que esta experiencia sea única