Suhaila es una chica de 15 años. Estudia noveno curso en la Escuela Secundaria para Niñas en una escuela de Bangladesh y es la primera niña en su clase en obtener la puntuación más alta en los exámenes.
Hoy, acude a la escuela con normalidad y es una niña feliz, pero la vida de Suhaila no ha sido fácil. Hoy te contamos su historia.
Unos inicios complicados en la escuela
La historia de Suhaila se desarrolla en Bangladesh, un país donde la tasa de alfabetización de adultos no llega el 58% y donde
las niñas sufren una gran discriminación que, en demasiadas ocasiones, las obliga a abandonar la escuela. La
pobreza que viven muchas familias y la
falta de concienciación sobre la necesidad de que los niños y niñas acudan a la escuela, también son factores que afectan negativamente y provocan altas tasas de absentismo escolar, sobre todo entre la niñas. Así sucedió con Suhaila que, durante mucho tiempo, no pudo acudir a la escuela con regularidad.
Afortunadamente, en el año 2010 Suhaila fue admitida en el curso de preescolar de uno de los centros de Educo en Bangladesh. En ese momento su padre no tenía trabajo, era muy pobre y no aceptó la matriculación de la niña en la escuela. Sin embargo,
Suhaila demostró ser una estudiante brillante y todos los años obtenía buenas notas. Pero en el año 2015, mientras Suhaila se preparaba para un examen importante del gobierno,
su padre quemó la casa familiar dejándola reducida a cenizas junto con todos los libros y el material escolar de la niña.
Ante esta situación, nuestro equipo de terreno trabajó para ayudar a que la niña se recuperara de la conmoción. Finalmente, y gracias a toda la motivación que recibió, no solo
logró una matrícula de honor en el examen del gobierno, sino también una beca de talento. Uno de los mayores retos fue trabajar con el padre de la niña para concienciarle y hacerle entender la importancia de que Suhaila siguiera estudiando. Al final el padre, que siempre se había opuesto a que hija estudiara, entendió su importancia y ahora está muy comprometido para que continúe con sus estudios. Se siente muy contento de que los profesores le hayan hecho cambiar de parecer y que ahora apoye a su hija en este camino:
"Educo ha cambiado la vida de mi hija" dice
.
Sin duda, uno de los factores decisivos para que Suhaila pudiera continuar con sus estudios fue el trabajo de concienciación que nuestro equipo realizó con el padre. Sin embargo, también ha habido otros factores que han ayudado a que Suhaila pudiera seguir estudiando y a que sacara tan buenas notas en los exámenes. Por un lado, todo
el equipo de la escuela prestó especial atención a la educación de Suhaila. Incluso
visitó regularmente su casa para comprobar las condiciones de su educación y mejorar el ambiente familiar. Las reuniones de padres también fueron otros catalizadores para mejorar su vida. Posiblemente, si todo el trabajo de seguimiento y apoyo de estos profesionales, nada de esto habría sido posible.
Suhaila sueña con ser doctora
Pese a haber tenido que enfrentarse a tantos obstáculos, Suhaila no se ha rendido y ha podido seguir estudiando para poder alcanzar su sueño algún día.
"Educo me ha enseñado a ver mis sueños" dice la niña con una sonrisa en su rostro.
En la actualidad, sigue estando becada por Educo. Le gusta mucho el ambiente de aprendizaje en su escuela. Su asignatura favorita son las matemáticas y
su objetivo en la vida es ser doctora para poder ayudar a la gente de su comunidad. Quiere continuar estudiando porque sabe que sólo así podrá cumplir su sueño y nosotros seguiremos apoyándola para que así sea.
Educo en Bangladesh
Suhaila forma parte del proyecto ‘
Fortalecimiento de un entorno de aprendizaje acogedor y protector para los niños en las escuelas de Educo’ donde proveemos a los estudiantes de materiales y uniformes, otorgamos becas de estudio con las que se cubren los costes de exámenes oficiales, damos apoyo nutricional y médico a niños enfermos, ofrecemos formación en derechos del niño y protección, y formamos a los profesores para que puedan continuar ofreciendo una educación de calidad a sus alumnos.
Suhaila demuestra la importancia de superarse y nunca dejar de luchar por sus sueños. Ella misma recomienda a otros estudiantes que no se desmoralicen cuando se enfrenten a cualquier obstáculo porque solo si luchan por su objetivo, conseguirán tener una vida digna
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