Como apunta La Vanguardia,
en este artículo, “cada vez más familias recurren a la mediación para encontrar una solución al problema provocado por el uso de las nuevas tecnologías en los jóvenes.” Y el problema es grave. Según el mismo periódico, sólo en Cataluña,
se produce una media anual de entre 150 y 160 detenciones de menores por casos denominados como violencia filioparental, relacionado o derivados del uso o la falta de medios electrónicos. Para que puedas mediar bien y que tus discusiones lleguen a buen puerto, aquí van
3 claves para que el móvil o el ordenador no se interponga entre vosotros.
Como padres y educadores, debemos saber cómo razonar con los niños acerca del uso de los dispositivos digitales (móviles, ordenadores, tablets, videojuegos e Internet). Y como todo lo relacionado con la educación infantil,
debemos poner énfasis en razonar, argumentar y dialogar con ellos para que entiendan por qué sÍ y por qué no. Usar frases como "por qué yo lo digo!" ya no vale.
Además, de esta manera,
no solo estarás ayudándoles a tomar mejores decisiones, a ser responsables y participativos sino a
ser independientes, el primer paso para convertirse en adultos autosuficientes.
Cada vez más nuestros pequeños nos exigen tener todo tipo de dispositivos porque sin ellos, “no son nadie”.
Pero darle lo que desean no siempre es lo mejor para ellos. Y aunque pudiéramos, los niños tienen que
aprender a valorar lo que tienen, a esperar y a esforzarse por conseguir objetivos. Si aún no has leído,
“Eso no es justo, Papá” te animamos a hacerlo para descubrir cómo hablar con nuestros hijos sobre asuntos delicados sin perder la ilusión y la esperanza.
Claves para mediar
Peter Nikken y Jeroen Jansz, de la Universidad de Rotterdam, tienen una misión: mejorar la comunicación entre padres e hijos cundo se trata de temas relacionados con dispositivos electrónicos como el móvil. Según ellos, hay tres formas de hacerlo: a través de la mediación activa, mediación restrictiva o el uso compartido.
Recuerda que
cada juego o app del teléfono contiene información acerca de su uso, los valores pedagogícos, edad recomendada y los beneficios que aportan. Como padres, debemos además interesarnos por cómo juegan nuestros hijos y qué tipo de comportamiento despierta en ellos. Cuando te sientes a su lado, no dudes en hacerles preguntas y escuchar lo que tienen que decir.
Mediación activa
Se ha comprobado que la mediación activa es la mejor manera de controlar el uso sin que los niños se enfaden. Además, reduce la exposición a contenidos violentos y los efectos que pueden llegar a tener.
Este tipo de mediación es instructiva, una en la que se comparten comentarios y explicaciones sobre los contenidos que se ven.
Padres que optan por la mediación activa son aquellos que se sientan un rato con sus hijos mientras estos juegan o se entretienen con dispositivos electrónicos.
“¿Cómo te enteraste de este juego? ¿Cómo se juega ¿Cuál es tu personaje favorito y por qué? ¿Me dejas probar?”
Frases de este estilo no solo mostrarán que sientes interés real por lo que hacen sino que hará que te escuchen mejor.
Comprueba los aspectos positivos y negativos del juego o la aplicación y asegúrate de compartirlo con tus hijos. “Me he dado cuenta de que con este juego puedes mejorar tu dexteridad/habilidades motoras, concentración….” O “no me gusta cómo te comportas cuando pierdes…”
Mediación restrictiva
La mediación restrictiva consiste en restringir lo que pueden ver y por cuanto tiempo.
Se trata de ejercitar el control sobre el contenido y la duración. Esto solo tiene sentido cuando nuestros niños son pequeños y no son capaces de distinguir lo que es apto y lo que no. Con
los niños más mayores, hay que razonar y argumentar y motivarles a hacer lo mismo.
“No me gusta que veas este programa porque no es apto para niños de tu edad. ¿Por qué crees que niños como tu no deberían verlo?” Y en lugar de dejarle sin juego, ¿por qué no investigas cuales son los mejores para su edad? Y si te ayudan, mucho mejor. Recuerda, castigarles no funciona. Si tus hijos necesitan disciplina,
hay otros métodos mucho más eficaces.
Si quieres conocer las 18 reglas que una madre americana exigió a su hijo para tener un iPhone, no dejes de leer este
interesante artículo.
Uso compartido
Este tipo de mediación fomenta a padres e hijos a ver, jugar y participar de manera activa y juntos. Cuanto más compartas sus horas de juego y sus intereses, mejor comunicación tendrás. No olvides de hablar con ellos mientras juegues y enseñarles
las claves para reforzar los valores positivos.
Si has notado que tus hijos no respetan los horarios o límites marcados por ti y son notables sus
cambios de comportamiento incluyendo el uso de la violencia verbal o física, es preferible pedir ayuda profesional.
¿Sabías que existe una edad adecuada para el uso de internet? Aun así, si no existen unos límites, el uso constante de dispositivos móviles puede
causar estrés, adicción y frustración y, lo que es peor, un alejamiento del mundo real. Aquí te lo contamos.
Descubre las claves para un buen uso de internet, incluyendo cómo crear contraseñas seguras para los mas pequeños,
aquí.
Derechos de imágenes:
R.Nial Bradshaw,
Day Ray Jones.
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