Hace un año, el Alto Comisionado de las Naciones Unidas para los Refugiados advertía del recrudecimiento del conflicto en la República de Mali que obligaba a 150 mil personas a abandonar el país y a otras 230 mil a emigrar en zonas del interior. Hoy, Día Mundial de los Refugiados, hemos entrevistado a nuestra directora de Malí, Gwen de Jacquelot, para que nos cuente en primera persona cómo se vive este problema y qué estamos haciendo para reducir el sufrimiento de miles de niños que viven el conflicto.
Delegada Malí Educo
¿En qué situación se encuentra el país actualmente?
Después de largos meses de negociaciones, las elecciones presidenciales transparentes permitieron establecer un gobierno estable y reconocido por la comunidad internacional. Este mayo, el gobierno de Malí y los principales grupos armados rebeldes firmaron un acuerdo de paz. Sin embargo, Malí se enfrenta con varios retos: un número elevado de personas desplazadas en el interior del país, un contexto de seguridad todavía inestable y el freno de la economía. En nuestra zona de trabajo, Ségou, se encuentran más de 8.300 personas desplazadas.
¿Cuáles son los principales problemas a los que se enfrenta la infancia en Malí?
Uno de los principales problemas es la falta de acceso a la educación. El número de escuelas cerradas en las cinco regiones directamente afectadas por el conflicto —Gao, Kidal, Mopti, Ségou y Tombouctou— se eleva actualmente a 450, es decir, 100 más que en enero de 2015, y afecta a más de 23.000 alumnos. Debido al alto número de escuelas cerradas, los niños y niñas han de caminar largas distancias para poder asistir a las escuelas que todavía permanecen abiertas; y la inseguridad permanente que se vive todavía en el país hace que estos niños puedan ser víctimas de secuestros e incluso de reclutamiento en grupos armados.
¿Cuál es la respuesta de Las Naciones Unidas ante esta situación?
La ONU ha elaborado un plan de respuesta con el que prevé cubrir las necesidades básicas de un millón y medio de personas, tales como acceso al agua, saneamiento, educación y protección.
¿Qué hacemos desde Educo para ayudar a estos niños y niñas?
Trabajamos para integrar a estos niños, 227 niños en total de los cuales 128 son niñas, en nuestras escuelas. Hacemos clases de refuerzo y otras actividades para que se adapten a este nuevo lugar y se sientan como uno más en el nuevo cole. Para ello, y como hacemos con el resto de niños, les damos un kit de material escolar y les proporcionamos atención médica.
Conoce el testimonio de Mesa, de 12 años. Ella y su familia tuvieron que huir de su ciudad natal, Tombuctú, hacia Ségou, a causa del conflicto armado que vivió Malí.