"Si mis padres no me hubieran matriculado en la escuela, no podría haber continuado con mi educación. Esto sólo ha sido posible porque Educo ha estado a mi lado como un fuerte guardián". Laboni vive en Bangladesh y es la mayor de tres hermanos. Su padre vende verduras y su madre es ama de casa. Para ellos es muy complicado mantener a la familia y más asumir los gastos de la educación de su hija, pero se enteraron de que en su municipio había una escuela de Educo donde las niñas reciben educación gratuita. Laboni fue admitida en la escuela y, desde el principio, impresionó a todos con sus buenos resultados.
"Laboni solía venir a la escuela regularmente y prestar atención en sus clases. A pesar de ser pobre, estaba muy dedicada a sus estudios. Todos los profesores están muy contentos con sus resultados", dijo el director de la escuela.
Gracias al programa de apadrinamiento de Educo,
ha recibido apoyo para poder continuar su educación desde preescolar (en el año 2013) hasta la actualidad. Recientemente, Laboni ha obtenido un A+ en el examen nacional de finalización de la educación primaria y ahora continúa con sus estudios de secundaria. Con su actitud educada y sus brillantes resultados, no nos extraña que se haya ganado
el cariño de sus maestros y compañeros de clase. Siempre ha recibido el apoyo de sus maestros que, según ella, no sólo la iluminaron con sus estudios, sino que también la animaron a participar en diversas actividades extraescolares. Fue así como se convirtió en miembro de Little Doctor Team (Pequeño Equipo de Doctores) y del Consejo de Estudiantes de la escuela.
A Laboni le encantan las matemáticas y se le dan muy bien. Ayuda a sus compañeros de clase que tienen problemas con esta asignatura. Ella misma
quiere ser maestra en el futuro para enseñar a los niños pobres de la comunidad. Con suficiente apoyo económico y pedagógico y una crianza adecuada, Laboni podrá hacer realidad su sueño algún día. Pero aún queda mucho camino por recorrer, ya que la pobreza, la presión social del matrimonio precoz y otras numerosas barreras sociales siguen amenazando su futuro.
La situación en Bangladesh
A diferencia de Laboni,
muchos niños y niñas en su país
no acuden a la escuela debido a la pobreza, la escasez de centros educativos, la distancia del colegio, los matrimonios infantiles o la falta de concienciación de las familias sobre la importancia de dar una educación a los niños y niñas. Como consecuencia de lo anterior, muchos niños y niñas
se ven obligados a trabajar para poder ayudar a sus familias y no es raro ver a niños y niñas de entre 5 y 17 años en fábricas textiles, talleres, triturando piedras o buscándose la vida entre chatarra y desperdicios. La explotación infantil es un problema muy importante en el país. Además, los niños y niñas están expuestos a enfermedades debido a la falta de saneamiento y de condiciones de higiene en las viviendas.
Para mejorar el acceso a la educación en Bangladesh,
ponemos en marcha un proyecto con el que hacemos posible que muchos de estos niños puedan acceder a una educación de calidad en las escuelas de primaria que tenemos en el país. La enseñanza que se imparte en estos centros, desde preprimaria hasta el séptimo curso, sigue el plan de estudios fijado por el gobierno, con lo que los alumnos siguen el currículo formal del Estado y se presentan a los exámenes oficiales igual que el resto de estudiantes del país que acuden a escuelas públicas.
Además de permitir el acceso a la educación,
nuestras escuelas constituyen un entorno seguro para los niños y niñas. Entregamos materiales didácticos al alumnado, formamos a los maestros en nuevas pedagogías, estimulamos a los niños y niñas para que aumente su interés en el estudio, potenciamos sus habilidades con actividades extracurriculares, introducimos las nuevas tecnologías en el proceso de aprendizaje, fomentamos la participación de los alumnos y ofrecemos formación básica sobre salud, higiene y habilidades generales para la vida de modo que estén preparados para tener un futuro mejor.
Ayúdanos a seguir haciendo posible que niños y niñas como Laboni tengan acceso a una educación de calidad, solo así podrán tener la oportunidad de tener un futuro mejor.
Hazte socio y ayúdanos a hacerlo posible.