Si un niño o una niña pequeña se enfada con un amigo su impulso suele ser pegar. En estos casos los padres y madres tendemos a decirle que no se enfade para que no pegue, pero para una buena gestión de emociones la idea sería decirle: “Enfádate y habla en lugar de pegar. Expresa lo que te molesta con respeto...
Conoce quiénes somos, qué hacemos y por qué lo hacemos.
Recibe nuestra newsletter con todas las novedades.
En momentos trágicos como éste, los niños y niñas son los más vulnerables. Dona ahora ¡Necesitan nuestro apoyo!