El día 19 de abril se celebra el
Día Mundial de la Bicicleta y queremos aprovechar la fecha para hablarte de los
beneficios de montar en bicicleta para niños y niñas y también de cómo enseñarles a montar en bicicleta con algunos trucos sencillos.
¿Cómo enseñar a un niño o niña a montar en bici?
Las
bicicletas se han convertido en un elemento muy utilizado porque no solo ayudan a ponerse en forma, sino que también son un medio de transporte limpio y respetuoso con el medioambiente. Muchas personas se desplazan por las ciudades en bicicleta, para ir al trabajo o darse un paseo, y los carriles para bici son cada vez más frecuentes en todos los lugares.
Pero la habilidad de montar en bici normalmente se aprende de pequeño, y somos los padres y madres los que tenemos que
enseñar a nuestros hijos e hijas a montar en bicicleta. ¿Qué consejos se pueden seguir para que los niños y niñas aprendan a montar en bicicleta? Te los contamos:
- Ajuste de la bicicleta. Lo primero que tendrás que hacer es ajustar los pedales y el asiento. El asiento debe quedar a una altura que facilite que el niño o la niña apoye los pies en el suelo sin estar sentado. Se puede aprender a montar en bicicleta con una que no tenga pedales, de manera que sea el propio niño o niña quien regule su equilibrio con su propio cuerpo.
- Buscar el lugar adecuado. Para que el aprendizaje de montar en bicicleta sea positivo es importante buscar un lugar tranquilo, que sea bastante llano, en el que no haya obstáculos y con poca gente. En el asfalto la bicicleta rodará mejor, aunque las caídas pueden ser más peligrosas. En el césped, sin embargo, la bici rodará peor pero las caídas serán menos peligrosas. Una solución puede consistir en buscar un lugar con césped y algo de inclinación. Para evitar sustos es importante utilizar siempre un casco adecuado a la edad del niño o niña. También se pueden usar rodilleras y otras protecciones.
- Mantener el equilibrio. Es el paso esencial para aprender a montar en bicicleta. Se trata de mirar al frente y avanzar poco a poco. Se puede comenzar impulsando la bicicleta con los pies y dejando que avance con la inercia, para luego volver a poner los pies en el suelo. A medida que el equilibrio mejora, a base de repetir este ejercicio, se podrán hacer tramos más largos manteniendo el equilibrio. No es recomendable sujetar al niño o niña del sillín con mucha frecuencia porque no aprenderán a mantener el equilibrio, y lo mismo ocurre si se utilizan bicicletas con ruedines que mantienen la bicicleta siempre recta.
- Control de la bicicleta. Una vez que el niño o niña es capaz de mantener el equilibrio es el momento de saber cómo controlar la bicicleta, por lo que se puede empezar haciendo un zigzag sin apoyar los pies. De esta manera se controlarán los cambios de dirección para saber girar.
- Frenada. Saber frenar es fundamental para montar en bicicleta. Una vez que se domina el equilibrio y el control, es el momento de poner un tope en el camino y aprender a frenar ahí. Se deberán utilizar tanto el freno delantero como el trasero.
Es importante, para
dar confianza a vuestro hijo o hija, tener mucha paciencia y recordar que algunos niños y niñas aprenden en minutos y otros necesitan varios días de práctica para aprender. Puede que haya alguna caída sin importancia, pero todos nos hemos caído intentando aprender.
Beneficios de montar en bici para niños y niñas
Con la llegada del buen tiempo, montar en bicicleta es una excelente actividad para hacer en familia, ya que se realiza al aire libre y nos permite estar en contacto con la naturaleza. Estos son los
beneficios que aporta montar en bicicleta a los niños y niñas:
- Es una manera de ponerse en forma. Algunos niños y niñas pueden padecer obesidad debido a la vida sedentaria y a una mala alimentación, por lo que montar en bici puede ser una forma de luchar contra el problema y hacer una actividad física.
- Es un buen ejercicio para el corazón. Montar en bici acelera los latidos del corazón, por lo que mantiene a los niños y niñas activos y les cansa para que duerman mejor por la noche.
- Ayuda a fortalecer los vínculos entre la familia. Cuando se practica el ciclismo en familia se fortalecen los vínculos entre padres, madres, hijos e hijas puesto que se realiza una actividad en la que se pasa tiempo juntos y se comparten experiencias nuevas.
- Contribuye a disfrutar y aprender de la naturaleza. Cuando se practica el ciclismo en el campo o en parques los niños y niñas pueden aprender a la vez la importancia que tiene respetar el entorno natural y la biodiversidad.
- Impulsa el aprendizaje de normas. Montar en bicicleta, sobre todo si se debe atravesar alguna zona urbana, requiere el respeto de ciertas normas como ceder el paso, tener cuidado con los peatones o con los vehículos o montar por los lugares señalizados. Esto favorece que los niños y niñas aprendan que existen una serie de reglas que hay que cumplir para montar en bicicleta de forma segura. Es importante evitar carreteras peligrosas o con muchos vehículos. En el caso en que sea necesario circular por una parte de carretera, es fundamental permanecer a la derecha.
- Ayuda a comprender que existen otros medios de transporte. La concienciación sobre la necesidad de cuidar el medioambiente se fortalece cuando los niños y niñas comprenden que existen otras formas de trasporte en las que no es necesario consumir energía, como sucede con el coche o el autobús, y que son totalmente ecológicas como la bicicleta.
Tal y como has visto el aprendizaje de los niños y niñas no solo es estudiar y hacer deberes, también puede consistir el algo tan divertido como
montar en bici. Será una experiencia que disfrutarán y que no olvidarán.
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