Constancia y dedicación son claves para superar dificultades

Anita nació muy pequeña y con un problema en el hemisferio derecho: tenía retraso en el habla y empezó a caminar cuando tenía ya más de tres años. Ella es una de la niñas que acude asiduamente a los talleres de psicomotricidad que llevamos a cabo en Bolivia junto con la Fundación Centro de Cultura Popular (FCCP). 

La madre de Anita, María, nos relata cómo su pequeña ha logrado mejorar y avanzar en muy poco tiempo: “Mi niña empezó a caminar un poco antes de entrar al colegio y se le entendía muy poco lo que hablaba. La inscribí en el prekínder (educación preescolar) pero se caía mucho y le costaba relacionarse con otros niños y niñas. Tampoco podía realizar las actividades del curso", nos cuenta.  

Una situación que como madre la angustiaba mucho. Por eso decidió buscar ayuda y dio con nuestras clases. Ella misma nos lo explica: "Empezamos las sesiones de psicomotricidad y ha mejorado mucho. Estas clases le han permitido avanzar, ahora puede hablar mejor, juega más, puede relacionarse mejor con los niños, camina mejor y hace todo lo que antes no podía hacer.  Este año cursó el kínder y pudo realizar sus tareas en los cuadernos, incluso ha logrado graduarse con felicitaciones de la directora y de las otras profesoras. A ella le gusta mucho jugar con otros niños, ya está más habituada, los imita y logra hacer lo que los otros niños hacen. Le gusta hacer amistades y compartir".  

"Ella lo va a lograr mucho más porque estoy segura, y ella también, de que puede hacerlo".

Ahora, María se siente inmensamente agradecida y feliz de ver cómo avanza su hija: "Antes sentía un dolor muy grande al verla decaída y sin poder hacer muchas cosas. Ahora, me siento muy orgullosa de tanto avance que ha logrado". 

Pero esta madre coraje está convencida de que su hija aún puede avanzar y mejorar mucho más: "Ella va a lograr mucho más porque estoy segura de que puede hacerlo. A otras familias que pasan por esta situación yo les diría que no dejen a sus hijos, que luchen por ellos, por su salud. Nuestros hijos necesitan nuestro apoyo, nuestro amor, el cariño de sus familias. Instituciones como Educo y FCCP son un gran apoyo, nos brindan una gran ayuda para que nuestros hijos e hijas salgan adelante”. 

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