¿Conoces los derechos de los niños y niñas con discapacidad?

El día 3 de diciembre se celebra el Día Internacional de las personas con discapacidad y en este post queremos poner en evidencia los problemas de los niños y niñas con discapacidad que hay en el mundo y cuáles son sus derechos.

Se estima que en el mundo hay más de 93 millones de niños y niñas con discapacidad y, en muchas ocasiones, el problema no es el reconocimiento de los derechos en sí, sino la garantía de que se respetan esos derechos, por ese motivo los niños y niñas que tienen algún tipo de discapacidad son un colectivo vulnerable que debe ser protegido.

¿Cuál es la situación de los niños y niñas con discapacidad?

En el año 2013 Naciones Unidas publicó su Informe sobre el estado mundial de la infancia: niñas y niños con discapacidad, y puso de manifiesto como la forma más frecuente de vulneración de los derechos de estos niños y niñas es la discriminación. Además, estos menores pueden sufrir, en el entorno familiar, institucional y social, violencia física o psicológica. Por otro lado, solo el 2% tiene acceso a la educación.

¿Cuáles son los derechos de los niños y niñas con discapacidad?

Los derechos de los niños y niñas con discapacidad se regulan en dos instrumentos fundamentales:

- La Convención sobre los Derechos del Niño. Es un tratado internacional que tiene por objetivo el reconocimiento de los derechos humanos de los niños y niñas. Se considera que son niños y niñas los menores de 18 años.

- La Convención sobre los Derechos de las Personas con Discapacidad.

- Por otro lado, tanto a nivel de la Unión Europea como a nivel nacional, existen diversas normas que regulan los derechos de los niños y niñas con discapacidad.

En general, los niños y niñas con discapacidad tienen los mismos derechos que el resto de los niños y niñas, pero se añaden algunas especificaciones en atención a su vulnerabilidad. Podemos destacar los siguientes derechos:

- Derecho al ocio. Si hay algo que los niños y niñas necesitan es jugar. El juego es una forma esencial de aprendizaje y de relación con otros niños. En el caso de los niños y niñas que tienen alguna discapacidad suele ocurrir que las personas que les cuidan se centran tanto en atenderles que no fomentan el juego, la interacción con otros niños o la diversión. Es importante, en estos casos, que se fomente el juego y que los juguetes estén adaptados de forma que se puedan utilizar tanto por niños y niñas con discapacidad como por niños y niñas sin discapacidad, de esta forma se fomenta la igualdad.

- Derecho a la educación. Tal y como hemos comentado anteriormente, solo un 2% de los niños y niñas con discapacidad tiene acceso a la educación. El derecho a la educación supone la necesidad de recibir una educación orientada a sus necesidades que favorezca la igualdad y a participar en actividades escolares con los apoyos y las adaptaciones que necesiten. En Educo trabajamos para que todos los niños y niñas reciban una educación inclusiva, equitativa y de calidad.

- Derecho a la libertad de expresión. Este derecho supone la posibilidad de que los niños y niñas con discapacidad puedan decir su opinión sobre todo en relación a temas que les afectan directamente como su propia discapacidad.

- Derecho a circular libremente. Esto significa que los medios de transporte (tanto privados como públicos) deben estar adaptados y ser accesibles para las personas con discapacidad. El hecho de que los vehículos no se adapten fomenta que los niños y niñas se queden en casa, no reciban una educación adaptada, no se relacionen con otras personas y se aíslen.

- Derecho a una vivienda digna. La vivienda donde viven los niños y niñas con discapacidad deberá estar adaptada a sus necesidades. Uno de los mayores obstáculos que se suelen encontrar en este sentido, son las viviendas o edificios con barreras arquitectónicas (escaleras, bordillos etc.). En algunas ciudades los ayuntamientos subvencionan la adaptación de las viviendas, pero en muchos lugares del mundo no existen ese tipo de ayudas.

- Derecho a recibir asesoramiento de cara al primer empleo. Una vez que las personas con discapacidad alcanzan la edad para poder trabajar, tienen derecho a recibir asesoramiento para saber cómo buscar su primer trabajo, acudir a una entrevista o trabajar por su cuenta. En este sentido, es importante destacar que el paro afecta de manera muy importante a los jóvenes con discapacidad, de hecho, según la encuesta realizada por la Fundación Adecco y JYSK, el 68% de los jóvenes con discapacidad está en paro y 6 de cada 10 es de larga duración.

- Derecho a la protección de la salud. Cada niño o niña con discapacidad tiene derecho a que se tomen las medidas correspondientes para proteger su estado de salud de manera que sea el mejor posible y a recibir el tratamiento que le corresponda y también a recibir información adaptada a su edad y a su estado mental relativa a su discapacidad, al tratamiento al que se le somete y a las posibilidades de ese tratamiento. El derecho a la protección de la salud se relaciona también con el diagnóstico precoz, ya que cuando se detecta una discapacidad de forma temprana, existen más posibilidades de que la deficiencia sea tratada y no se agrave.

Estos derechos se completan con una serie de derechos que corresponden a los familiares de los niños y niñas con discapacidad como el derecho a recibir apoyo en los cuidados a los niños y niñas con discapacidad que sean dependientes o el derecho a elegir el centro escolar más adecuado para cada niño o niña. Por otra parte, según la regulación aplicable, se podrán solicitar prestaciones por hijo o hija a cargo con discapacidad.

En definitiva, se trata de reconocer una serie de derechos de los niños y niñas con discapacidad que garanticen la integración y la igualdad de oportunidades para que puedan tener un futuro mejor y no exista la discriminación.

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