Un pequeño estudio publicado en Pediatric Exercise Science relaciona el peso y la actividad física en niños con las habilidades cognitivas, concluyendo que los niños más activos podrían obtener mejores puntuaciones en test de planificación o capacidad de atención. El estudio, aunque es muy pequeño pues sólo analizó los resultados de 90 niños corrobora los datos previos que relacionan el ejercicio y la actividad física con un desarrollo óptimo en niños. Para realizar el análisis se consideró como "niños activos" aquellos que participaban en actividades físicas - natación, danza, gimnasia o fútbol durante al menos una hora semanal.
El ser humano no está hecho para permanecer sentado. Los seres humanos somos nómadas y el ejercicio y la actividad física forman parte de nuestras actividades "naturales".¿No conoces a nadie que necesite moverse para poder pensar o incluso estudiar? Aunque el estudio no ha encontrado una relación causal para que los niños que menos se mueven tengan algo más de dificultad a la hora de realizar ciertas tareas cognitivas, la explicación probablemente vaya por estos derroteros. Los niños son niños y necesitan moverse para desarrollarse en plenitud.
La obesidad infantil es ya un problema de salud importante. En un círculo vicioso la falta de ejercicio produce sobrepeso en niños y el sobrepreso dificulta a su vez la realización de actividades físicas, aunque en niños este efecto es mucho menos visible. Más allá del exceso de comida o de comida rica en calorías es toda la organización social la que está promoviendo que todos tengamos cada vez más peso. Jornadas de colegio interminables, horas y horas de deberes, demasiada tele y poco tiempo para disfrutar con los padres son también las causas de que el sobrepeso en los niños aumente.
Animar a los niños a moverse no es sencillo, sobre todo porque nosotros, los adultos, también nos movemos poco, pero tampoco imposible. Los niños son niños y casi cualquiera de ellos encontrará alguna actividad física que le guste, sólo es cuestión de ir probando. Es mucho más fácil si además la actividad es compartida por algún hermano, primo o amigo, pero también si son mamá o papá los que participan con él.
No es necesario apuntarnos a deportes de alta competición. Pasear por la montaña, ir los sábados a nadar o patinar los domingos por la tarde en el parque, comprar bicis para todos, jugar a juegos de baile en la consola, reaprender a bailar el hula-hop, hay un montón de actividades físicas lúdicas que puedes compartir con tus hijos, que son baratas y fáciles y no requieren una gran habilidad deportiva, ni que tú estés tan en forma como cuando tenías 20 años. Es sólo cuestión de ponerse y sobre todo de intentar disfrutar y si hace falta, reirse de uno mismo ( bailar el hula-hop era mucho más fácil antes).
No es que el deporte vaya a hacer a nuestros hijos más listos, es que moverse es imprescindible para la salud de los seres humanos, grandes y pequeños, como demuestran cada vez más estudios: hay que moverse. Preparados, listos...¡ya!
Derechos de fotografía: Alice Barigelli, Marcin Wichary
Fuente: Healthday
Deporte , desarrollo , Desarrollo cognitivo , Desarrollo infantil
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