El año 2020 será recordado siempre por ser el año más extraño de todas nuestras vidas. El año que nos tocó vivir una pandemia. El año que tuvimos que aprender a vivir en la “nueva normalidad”. El año que añoramos la libertad. El año que nos tuvimos que reinventar para apoyar a miles de familias a las que el coronavirus les dejó de la noche a la mañana en una situación muy complicada no solo a nivel sanitario, sinó también económico.
Hemos facilitado material para estudiar a 20.000 niños y niñas y acceso a educación online a 17.000.
Hemos repartido 8.000 transistores en aquellos países en los que se han seguido las clases a distancia a través de la radio, como en Burkina Faso o Malí.
Hemos facilitado información sobre cómo prevenir los contagios a 400.000 personas y repartido más de 60.000 lotes de higiene y limpieza que incluyen, entre otros, jabón, gel hidroalcohólico o mascarillas, en países como India o Nicaragua.
Hemos instalado más de 1.000 dispositivos de lavado de manos en las escuelas.
Hemos repartido 35.000 lotes de comida entre las familias.
En este video hemos recogido momentos que resumen nuestro 2020 y con él queremos dar las gracias a todas las personas que nos han estado apoyando y con las que seguiremos caminamos de la mano para lograr nuestra misión: el bienestar de la infancia. Gracias por proteger a la infancia más vulnerable.
El año 2020 está a punto de terminar, pero la pandemia no. La situación de la infancia corre el riesgo de empeorar durante este 2021 si no se toman medidas más contundentes. “En Educo llevamos meses viendo cómo la crisis social y económica causada por la pandemia ha agravado la ya difícil situación en la que vive la infancia más vulnerable. Hablamos de niños y niñas de familias que están teniendo serias dificultades económicas y que, a veces, viven en contextos en los que pueden sufrir todo tipo de violencias. Es imprescindible que los gobiernos de todos los países den un paso más allá y apuesten por medidas urgentes para protegerlos. La COVID-19 puede suponer un importante retroceso de todo lo que se ha conseguido durante los últimos 30 años en los derechos de la infancia”, afirma Pilar.
Pedimos a los gobiernos medidas urgentes y contundentes para paliar las consecuencias de la COVID-19 en la infancia más vulnerable
Insistimos en que es imprescindible que se tenga en cuenta la opinión de la infancia a la hora de tomar nuevas medidas, ya que nadie mejor que ellos sabe lo que ha significado la pandemia en sus vidas. Durante el cierre de las escuelas, cuando en la mayoría de los países en los que trabajamos había restricciones para salir de casa, nosotros quisimos preguntar a los niños y niñas qué pensaban y qué sentían. Y además de decirnos que echaban de menos ir al colegio y a sus amigos, también expresaron su preocupación por si alguien de su familia enfermaba o por cómo iba a afectar la crisis económica y social derivada de la COVID-19. Los adultos creemos que no entienden qué está pasando, pero son muy conscientes de ello y tienen mucho que aportar. Escuchémoslos.
balance 2020 , Bangladesh , Burkina , coronavirus , España , Faso , India , Malí , Nicaragua , rendición de cuentas , transparencia
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