Se necesita más formación para prevenir, detectar y actuar contra la violencia contra la infancia

Tres años después de la aprobación de la Ley Orgánica de Protección Integral de la Infancia y Adolescencia contra la Violencia (LOPIVI), desde Educo lamentamos la falta de presupuesto para desarrollar todas las medidas que propone. En concreto, pedimos más formación para todas y todos los profesionales que están en contacto con niños, niñas y adolescentes.  

En este sentido, denunciamos que la figura del coordinador de protección y bienestar de los centros educativos sigue sin estar bien implantada. “Falta presupuesto y tiempo para que las personas que tienen este papel puedan ejercerlo. En muchas ocasiones, no tienen el perfil idóneo ni tampoco se les da una preparación específica o bien la que reciben es muy superficial”, explica Pilar Orenes, nuestra directora general.

La escuela debe ser un lugar seguro

En una encuesta que realizamos en uestra ONG, pudimos corroborar que en un aula de 30 niños y niñas, 9 han sufrido acoso escolar o algún otro tipo de violencia en algún momento de su vida. Una cifra que nos preocupa puesto que la escuela debe ser un lugar donde niñas y niños se sientan a salvo, por eso es fundamental que la figura del coordinador de bienestar y protección pueda hacer de manera efectiva su función.

Otro caso preocupante para Educo es el de otra figura similar, la del delegado para entidades deportivas y de ocio y tiempo libre. “La violencia está en todas partes, también en este tipo de espacios. Sin embargo, es una figura aún poco regulada y muchas veces con escasa formación específica. Urge que todas las personas en contacto con la infancia estén preparadas para prevenir y detectar la violencia si realmente queremos acabar con ella”, asegura Pilar. “La aprobación de la LOPIVI fue un avance sin precedentes, un paso enorme. Pero si no se hace una clara apuesta en aspectos tanto presupuestarios como de tiempo y formación para ponerla en práctica, algunos de los temas que recoge pueden quedarse en papel mojado”. 

Desde nuestra ONG también insistimos en la importancia de proteger a la infancia de los riesgos de Internet. Para niños y niñas, el mundo offline y el online son parte de lo mismo. Y la violencia se produce en el aula, en casa o a través de las redes sociales. Es clave la formación digital continua y adecuada, dirigida a menores, familias y educadores. Asimismo, pedimos una mayor regulación del Estado y un mayor compromiso de las empresas tecnológicas, aunque valoramos muy positivamente la decisión del Gobierno de crear una estrategia integral de protección en Internet.

Educo, pionera en la formación para proteger a la infancia 

Llevamos más de 30 años comprometidos con la protección y el buen trato de la infancia en los 18 países donde trabajamos. En España hemos desarrollado la metodología PROTEGEmos, a través de la cual formamos a profesionales que están en contacto con niños y niñas y adolescentes en la prevención de la violencia y el acoso y en la creación de protocolos de detección y respuesta.

“Formamos a profesionales que trabajan tanto en centros educativos como en entidades sociales o clubs deportivos. A veces tenemos tan integradas algunas situaciones de violencia hacia la infancia que no nos damos cuenta de lo que son. Esta metodología permite que cada centro haga su propio análisis, que desarrolle protocolos de detección, que sepan cómo actuar en cada caso y se coordinen con otros actores clave (servicios sociales, policía, justicia...). Solo un abordaje integral es capaz de resolver un problema tan amplio y complejo”, asegura Pilar. A día de hoy, hemos formado ya a unas 400 entidades de toda España. 
 

También colaboramos con la Direcció General d’Atenció a la Infància i l’Adolescència (DGAIA) de la Generalitat. Hemos desarrollado un programa piloto en 5 Centros Residenciales de Acción Educativa (CRAE), donde viven niños y niñas en situación de acogida que han sufrido vivencias muy graves de violencia, como maltrato físico y psicológico, abusos sexuales o abandono, entre otros. “Desde la DGAIA tenemos el compromiso de velar por todos ellos y ellas, de mejorar sus condiciones de vida y de dotar de herramientas al personal de los CRAE para que puedan ejercer de la mejor manera posible su labor. La infancia que ha sufrido este tipo de violencias tiene que vivir en entornos donde se sientan protegidos y donde se fomente buen trato en la convivencia”, afirma Ester Cabanes, directora de la DGAIA.  

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