Durante millones de años las personas y la naturaleza han crecido y se han desarrollado de la mano, pero desde la revolución industrial algo cambió y nos hemos ido separando. Las reservas de la biosfera tratan, precisamente, de unirnos de nuevo y de encontrar una armonía para que podamos convivir respetando el medioambiente.
En nuestra ONG Educo consideramos que la educación ambiental es una parte muy importante del aprendizaje de niños y niñas y sabemos que a ellos también les preocupa. A través de las opiniones de los niños y las niñas que recogen varias investigaciones de nuestra ONG Educo como el informe ¿Cómo podemos vivir mejor juntas? nos hacemos conscientes de que, en sus relatos, perciben el medioambiente, la naturaleza y los animales no como un telón de fondo, como mayoritariamente lo perciben generaciones anteriores, sino como algo muy importante.
Esto significa que, para ellos, debemos tener en cuenta a la naturaleza y el planeta en lo que consideran una buena vida, es decir, piensan que tener un medioambiente sano es sinónimo de bienestar. Así, muestran su preocupación por la violencia hacia los animales y la Tierra, por contaminación o descuido, y la necesidad de cuidarlo y disfrutarlo.
Y, por supuesto, en nuestros proyectos incorporamos siempre el componente ecológico y promovemos también el vínculo de reciprocidad y corresponsabilidad entre los seres humanos y la naturaleza, siempre potenciando la creación de ideas y acciones concretas por parte de niños, niñas y adolescentes.
Los niños y las niñas son muy conscientes de la crisis ambiental. Estas son algunas de sus reflexiones:
“Cuidad el medio ambiente, es nuestro planeta, los árboles nos ayudan a respirar, nos protegen del sol y cuidan nuestra piel. Puede sembrar, plantar y cuidarlas para nuestro bien y para que dé sombra”. |
“Si se trata la contaminación, el medioambiente estará más limpio y mi vida también”. |
“Lo único que quiero es que todo el mundo sea amigo de la naturaleza”. |
"Por culpa de mucha gente, los humanos y los animales estamos perdiendo nuestro hogar y puede que nos extingamos dentro de unos años". |
Por eso, en este artículo, te contamos qué es una reserva de la biosfera y cómo explicárselo a tus hijos e hijas.
Imagina un lugar en el que existe una armonía entre la actividad humana y la naturaleza, un lugar en el que todo fluye para proteger el equilibrio. Desde un punto de vista técnico las reservas de la biosfera se definen como: Territorios en los que se armoniza la conservación de la biodiversidad biológica, cultural y el desarrollo económico y social, a través de la relación de las personas con el entorno natural.
Si una zona quiere ser declarada reserva de la biosfera lo debe solicitar el gobierno nacional a la UNESCO y decidirá la designación la directora general de la Unesco. En 2024, por ejemplo, la UNESCO designó once nuevas reservas de la biosfera en once países, entre los que están, por primera vez: Bélgica y Gambia.
Para explicarles a los niños y niñas qué son estos lugares podemos definirlas como un sitio especial donde la naturaleza y las personas se cuidan mutuamente. Donde las plantas, los árboles, los animales y las personas comparten un hogar.
Todas las reservas de la biosfera están compuestas por tres elementos esenciales que son los siguientes:
Es el centro de la reserva. La naturaleza está protegida de forma muy estricta en esta parte tanto desde el punto de vista de los paisajes como de las especies que viven ahí. Son lugares donde se encuentran animales y plantas que no existen en otras zonas. Como la protección es fuerte, las personas no pueden intervenir en esta zona. Es como una habitación secreta en la que las plantas y los animales viven tranquilos y protegidos.
Es como un cinturón que rodea la zona núcleo para protegerla. En esta área sí se permiten actividades humanas controladas, como investigación científica o turismo sostenible, siempre con el objetivo de no dañar el entorno natural. En esta área puede haber alguna comunidad rural que realice actividades tradicionales como la ganadería extensiva de ovejas, vacas o caballos.
Es el área más grande y la zona donde hay comunidades locales que viven y trabajan de forma sostenible.
Por ejemplo, en la isla de Gran Canaria existe una reserva de la biosfera desde 2005. En este enlace puedes ver cómo se delimita cada zona.
Las reservas de la biosfera tienen una misión muy importante: proteger la biodiversidad, fomentar el desarrollo sostenible y apoyar la investigación y la educación ambiental. Esta misión se desglosa en tres grandes funciones:
Conservar la biodiversidad biológica y cultural.
Favorecer un desarrollo económico sostenible tanto desde el punto de vista sociocultural como medioambiental.
Realizar un apoyo logístico al citado desarrollo.
Todo lo anterior tiene como consecuencia que los niños y niñas deben aprender cómo cuidar la naturaleza, porque ese cuidado también nos favorece a nosotros como personas que habitamos la Tierra.
Los más pequeños de la casa son como esponjas y aprenderán muy rápido de todo lo que vean y, sobre todo, aprenderán de ti, que serás su modelo a seguir. Para enseñarles la importancia de cuidar la naturaleza y las reservas de la biosfera se pueden realizar diversas actividades:
Qué mejor plan que ver una reserva y apreciar lo que significa. En la página de la Red Española de Reservas de la Biosfera puedes consultar el mapa dónde están situadas. Antes de ir, puedes animarlos a estudiar el lugar, las plantas y animales característicos y otros datos.
Otra buena opción es escoger una reserva de la biosfera en cualquier parte del mundo y hacer un collage con fotos para ver dónde está, cómo son las personas que viven allí, qué costumbres tienen, qué plantas y animales hay. Esto no solo es ayudará a comprender el lugar, sino que también aprenderán valores como el respeto.
En el mercado hay multitud de libros y vídeos que hablan de la biodiversidad. Por ejemplo, en este vídeo de la UNESCO se explica de forma sencilla qué es la biodiversidad y cómo influye la educación en la preservación de la naturaleza. También hay libros sobre educación ambiental como La ballena llena, Por qué debo ahorrar agua o Había una vez una gota de lluvia.
Desde nuestros hogares también podemos hacer muchas cosas para proteger la biodiversidad con actividades con nuestros hijos e hijas como:
1. Enseñarles a separar los residuos para que puedan ser reciclados. Puedes hacerlo como un juego con cubos de colores para cada tipo de residuo.
2. Hacer manualidades para reciclar materiales u objetos que haya por casa. Te dejamos algunas ideas:
En definitiva, las reservas de la biosfera son mucho más que espacios naturales protegidos, son la representación de un compromiso real y efectivo de las personas con la naturaleza que las rodea.
Enseñar a los niños y niñas sobre su importancia significa sembrar la semilla del cuidado y el respeto por nuestro planeta. Si quieres contribuir a que todos los niños y niñas tengan acceso a una educación de calidad, te animamos a que colabores con nosotros.
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