Todos unidos para que Mohim vuelva a la escuela

El trabajo infantil es uno de los principales problemas de Bangladesh, un país que, aunque ha avanzado moderadamente en la lucha para erradicar el trabajo infantil, un gran número de niños y niñas siguen trabajando, y muchos de ellos, en trabajos especialmente peligrosos que ponen en riesgo su vida y su salud.  

Según la encuesta nacional sobre trabajo infantil realizada por la Oficina de Estadística de Bangladesh en 2013, aproximadamente 3,45 millones de niños y niñas trabajan, de los cuales 1,28 millones realizan trabajos peligrosos.  

Un ejemplo de este tipo de trabajo peligroso en el que se utiliza a niños y niñas en Bangladesh es la cría de camarones y cangrejos o el procesamiento de pescado seco.  Realizan estas labores durante horas bajo el sol directo, transportando cargas pesadas y aplicando pesticidas nocivos. Trabajan una media de 10 horas al día con un salario escaso o nulo y soportan condiciones peligrosas que provocan muchos problemas de salud. La mayoría de estos niños nunca han ido a la escuela o la han abandonado porque en estas zonas casi no hay escuelas de primaria ni de formación profesional.  

Es el caso de Mohim de nueve años que tuvo que abandonar la escuela para ponerse a trabajar en la piscifactoría: "Si Mohim no trabaja, moriremos de hambre", sentenciaba su madre. 

Y Mohim lo logró 

Y es que Mohim llevaba sobre sus espaldas de tan solo nueve añitos la pesada carga de mantener a su familia ya que sus dos padres están enfermos e imposibilitados para trabajar. Aun así, gracias a la solidaridad vecinal que se han unido para ayudar económicamente a la familia y el apoyo de nuestra ONG, Mohim ha vuelto a la escuela, que compagina con un trabajo a media jornada. “Yo quería volver a la escuela, pero no tenía forma de dejar de trabajar por la crisis financiera de nuestra familia, pues soy el único que gana dinero", nos cuenta.  

Ahora su familia recibe múltiples apoyos, también del gobierno, ya que los acompañamos a solicitar las ayudas gubernamentales para estos casos, y de esta manera Mohim es más libre y puede concentrarse en estudiar: "Intentaré seguir estudiando y me gustaría ser profesor en el futuro", explica. 

Bangladesh , educación , escuela , Pobreza , Pobreza infantil , Trabajo infantil