El cambio climático y su impacto en los niños y niñas

El cambio climático es un grave problema al que nos enfrentamos hoy en día en todo el mundo. En un país como la India, que avanza con paso firme hacia el progreso y el desarrollo, pero que se enfrenta a problemas como la pobreza y el desempleo, el impacto es aún peor.  

Los drásticos cambios de tiempo perjudican los ciclos agrícolas y modifican a la fuerza la manera de trabajar la tierra. Las lluvias irregulares, la erosión de las riberas de los ríos, las inundaciones, la subida del nivel del mar y el tiempo inusualmente seco o caluroso han aumentado drásticamente las dificultades, provocando migraciones forzosas.  

Un informe de la Red de Acción Climática de Asia Meridional afirma que, para 2050, 45 millones de personas en India podrían verse desplazadas debido a estos efectos del cambio climático si no cumplimos los compromisos y objetivos marcados. Pero es que ya este pasado agosto de 2024 la India ha registrado 374 muertes por golpes de calor y más de 10.000 entre 2013 y 2022. Los datos son alarmantes y no hacen más que empeorar con el paso de los años.  

La ciudad de Odisa, donde trabaja nuestra ONG Educo, sufrió una de las peores olas de calor en el verano de 2024. En todo el estado fue la región con más muertes registradas por el aumento de la temperatura. La mayoría de estas muertes se produjeron en regiones rurales, donde la gente realiza trabajos rigurosos al aire libre, como la agricultura, y tiene un acceso limitado o nulo a infraestructuras sanitarias de calidad.  

Consecuencias en la educación 

Con el cierre de las escuelas para proteger a los alumnos del calor extremo, los niños y niñas del estado pasaron gran parte de la temporada alejados de la educación y de las oportunidades de socializar. En las zonas de nuestros proyectos, observamos el impacto negativo que tenía en el bienestar mental y físico de los niños. Por eso, a través de modalidades offline y online, nos aseguramos de que los niños recibieran apoyo psicológico y oportunidades de participar en grupos de adolescentes y clubes juveniles.  

Pero lo más importante es sensibilizar sobre lo importante que es conservar nuestro medio ambiente limpio y sano. Por eso, junto con nuestra ONG socia local PREM, hemos emprendido varias iniciativas en este sentido en las zonas del proyecto. Los pueblos de Odisha en los que trabajamos han sido históricamente ricos en bosques, pero han sufrido daños medioambientales de enorme magnitud a lo largo de los años. Aunque es necesario que el gobierno aplique leyes estrictas para proteger a los bosques frente a la industrialización desenfrenada, también hay que formar a las comunidades para que protejan su entorno.

Plantación de árboles y concienciación  

Para reiterar la necesidad de preservar y mejorar la vegetación de la región, organizamos una campaña de plantación de árboles de 15 días de duración en 2023 con la que plantamos más de 3.000 árboles jóvenes con la ayuda del departamento forestal, los aldeanos y los niños y adolescentes. También en 2024, a finales de julio, pusimos en marcha esta campaña durante 15 días. Gracias al gran apoyo del departamento forestal del gobierno y al entusiasmo de las comunidades, la campaña se amplió a un mes.  

"Cuando éramos más jóvenes, teníamos una gran selva cerca de nuestro pueblo. Solía ser densa y el clima era sistemático: los veranos eran buenos y las lluvias regulares. Sin embargo, hoy la selva casi ha desaparecido. Este año ha llovido muy poco y no hemos podido cultivar arroz ni otras cosechas estacionales. He aprendido en nuestras conversaciones con otros adolescentes, en el programa Educo-PREM, que un cambio climático tan drástico se debe a la deforestación a gran escala. Por eso participo en esta campaña de plantación. Quiero que mi entorno sea más verde y que haga buen tiempo", nos cuenta Jinima Pradhan, una estudiante de 17 años.

Namanti Pradhan, una joven de 25 años, es muy consciente de la magnitud del problema: "El problema del calentamiento global nos afecta a todos, afecta a nuestra vida cotidiana, incluidas nuestras actividades agrícolas, que son nuestra principal fuente de sustento. Cuando se pierden las cosechas, muchas familias tienen que emigrar en busca de otros medios de subsistencia. Pero también impacta en la educación de los niños. Muchas veces, conduce al trabajo infantil. Participo en esta campaña de plantación y animo a mis amigos y familiares a plantar árboles. Solo así podremos tener un futuro mejor". 

Cuando empezamos la campaña, adquirimos algunos árboles jóvenes y los distribuimos por escuelas y pueblos para que los estudiantes y los miembros de la comunidad llevaran a cabo las plantaciones. Así, se responsabilizan y se identifican más con la campaña. Nita Pradhan, de 13 años recuerda: "Este año los veranos han sido extremos. Nuestra escuela estuvo cerrada muchos días por la ola de calor. Ni siquiera pudimos ir a jugar durante esas vacaciones. Muchas plantas y árboles de mi pueblo murieron. He aprendido sobre el cambio climático en mi clase, y hoy voy a plantar arbolitos para tener sus frutos en los próximos años". 

A finales de agosto de 2024, se habían realizado más de 5.200 plantaciones en 60 pueblos y 30 escuelas. De ellas, Educo-PREM había proporcionado 1.000 arbolitos y el resto fueron dispuestos por los propios miembros de la comunidad. Aunque el gobierno también lleva a cabo campañas similares, como el Vana-Mahotsava (El festival de los bosques), no han dado lugar a una movilización masiva ni han conseguido que se convierta en una prioridad para los aldeanos. En este sentido, nuestra campaña de Educo-PREM ha sido muy aplaudida.  

“Nuestros antepasados veneraban los árboles frutales: no talábamos nunca un árbol frutal. Lo que plantaban nuestros abuelos y abuelas lo disfrutábamos. Hoy estoy plantando arbolitos para que estos niños disfruten de sus frutos mañana. El clima ha cambiado tanto ahora que siempre es extremo. Tenemos que poner de nuestra parte para cambiarlo", nos cuenta una de las participantes de la comunidad de edad avanzada. 

cambio climático , educación , India , medio ambiente